Hace tiempo que escuchamos la expresión employee centricity, una nueva tendencia en la gestión de personas que consiste en mejorar la experiencia del empleado, pero ¿realmente se aplica cómo debería?
Hablamos de compromiso con los empleados, de poder generar oportunidades de crecimiento y evolución tanto para la propia empresa como para sus empleados. Hay quienes ven su aplicación solo como una estrategia de venta, como un nuevo enfoque de gestión… pero poner a los empleados en el centro es mucho más que esto.
¿En qué consiste el Employee Centricity?
No queremos quedarnos en la visión de que las personas están en el centro solo por una demanda de personalización de servicios, por la feroz competencia de los mercados, para diferenciarnos, o para generar nuevos productos y servicios. Poner a los empleados en el centro implica llevar a cabo acciones que realmente los empoderen y les den valor: involucrarlos en proyectos y planes de la compañía, ofrecer oportunidades de desarrollo profesional, motivarlos, diseñar planes personalizados según las necesidades de cada empleado para ayudarles a crecer y ser más fuertes, etc.
El objetivo principal del employee centricity es hacer que las personas se sientan parte de la compañía. Para ello, la empresa tiene que comprometerse a cuidar de los trabajadores, ya sea con flexibilidad frente a sus propuestas, ofreciendo experiencias de trabajo positivas, respetando sus opiniones como haciéndoles partícipes de los avances y objetivos de la organización. Algunas empresas ya están implantando iniciativas que aportan un valor añadido al personal, como una cultura de empoderamiento que les beneficie tanto a nivel personal como profesional.
Los empleados felices generan clientes felices, y, en consecuencia, se mejora la relación con ellos y se generan mejores resultados. Este nivel de satisfacción de los empleados es uno de los pilares del employer branding. Pues no hay que olvidar que, al final, los trabajadores son embajadores de la marca.
Cómo trabajamos el employee centricity en M&A
En Montaner&Asociados trabajamos con y para las personas. Desde el nacimiento de la compañía en 1973, siempre se han puesto a las personas en el centro de la estrategia. Son el principal activo de la compañía, la seña de identidad y principal área de negocio. Trabajamos para que la experiencia de los propios empleados sea excelente, como la que queremos que sea para nuestros clientes y candidatos.
Más allá de nuestra visión, misión y valores, hay que empaparse de la esencia de la organización, poder ser transversal y coherente con la estrategia, ser flexible e innovador, dentro de las posibilidades de cada empresa. Dejar huella en las personas, ayudar a potenciar sus competencias, crear escenarios de libertad organizacional, conocerse y posibilitar su crecimiento personal y profesional. Este es nuestro employee centricity.
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